Ser papá es una experiencia única y desafiante que nos hace reflexionar sobre el verdadero significado de la vida y el amor. La responsabilidad de criar y educar a otro ser humano es algo que nos cambia por completo, y nos hace enfrentar nuestros miedos, limitaciones y fortalezas. En este rol de padre, nos convertimos en modelos a seguir para nuestros hijos, y debemos ser conscientes de que nuestras acciones y palabras tienen un impacto profundo en su desarrollo y bienestar emocional. También aprendemos la importancia de la paciencia, la comprensión y la habilidad para resolver conflictos de manera constructiva.
Un buen
padre siempre esta presente cuando su hijo lo necesita. V 1 “Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto
llamé a mi hijo.”
A pesar de
las diferentes etapas que tienen que pasar nuestros hijos. V 2 “Cuanto más yo los llamaba, tanto más se alejaban de
mí; a los baales sacrificaban, y a los ídolos ofrecían sahumerios.”
En el proceso de crecimiento de
nuestros hijos muchos consideran que pueden estar sin nosotros, aun en esos
momentos ellos deben saber que pueden contar con nosotros.
Como es un buen Papá.
1. Les enseña a sus hijos no solo
a dar sus primeros pasos, el siempre está ahí para guiarlos en toda su travesía
por esta vida. V 3 “Yo con todo eso enseñaba a
andar al mismo Efraín, tomándole de los brazos; y no conoció que yo le cuidaba.” es muy importante que los
primeros años de la vida de nuestros hijos sean muy bien marcados por nuestra
presencia, posiblemente sean los únicos recuerdos que ellos y nosotros los
tengamos por siempre.
2. Se pone en el lugar de sus
hijos para poderlos entender. V 4 a “Con cuerdas
humanas los atraje, con cuerdas de amor” Jehová dice que nos atrajo con
cuerdas humanas él se pone a nuestro nivel. Él sabe que su mundo espiritual
para nosotros nos es algo desconocido.
3. Les ayuda con sus cargas. V 4 b
“; y fui para ellos como los que alzan el yugo de
sobre su cerviz, y puse delante de ellos la comida.” con el amor podemos
lograr cosas que con la fuerza nunca lo lograríamos. El amor nos hace proveer a
los demás de todo lo que necesitan sin que esperemos nada a cambio.
4. Nunca los abandona, en especial
cuando más lo necesitan. V 8 “¿Cómo podré
abandonarte, oh Efraín? ¿Te entregaré yo, Israel? ¿Cómo podré yo hacerte como
Adma, o ponerte como a Zeboim? Mi corazón se conmueve dentro de mí, se inflama
toda mi compasión.” un verdadero padre nunca intentara hacer daño a sus
hijos. Las consecuencias de sus malos actos es lo que termina destruyéndolos.
5. No se deja dominar por la ira.
V 9 a “No ejecutaré el ardor de mi ira, ni
volveré para destruir a Efraín;.” cuando un padre castiga a sus hijos
llevado por la ira causa daño y dolor. Cuando quieras corregir a tus hijos
tranquilízate toma aire y respira profundo.
6. Nunca deja su rol de padre. V 9
b “porque Dios soy, y no hombre, el Santo en medio
de ti; y no entraré en la ciudad” muchos padres en su afán de agradar a
sus hijos quieren ser sus amigos se vuelven complacientes y se olvidan de ser
padres para corregir. Sé amigó de tus hijos, pero nunca dejes de ser padre.
Un buen padre
siempre está pendiente de sus hijos, no importa las circunstancias, el tiempo o
la distancia, a los hijos siempre se los lleva en el Corazón.
