La gran mayoría de los seres
humanos vivimos en constante pleito y desacuerdo con los demás porque no
sabemos escuchar.
El pueblo de Israel estaba en
problemas con Dios porque tenía dificultad para escuchar. V 11 “Pero mi pueblo no oyó
mi voz,
E Israel no me quiso a mí”
El
saber oír sirve para que podamos llegar a acuerdos y de esta manera solucionar los posibles
mal entendidos. V 13-14 “¡Oh,
si me hubiera oído mi pueblo, Si en mis
caminos hubiera andado Israel! En un momento habría yo derribado a sus
enemigos, Y vuelto mi mano contra sus adversarios”E Israel no me quiso a mí”
El Escuchar Sí que es un
arte, porque no todo el mundo sabe hacerlo. Permanecer callado hasta que el
otro acabe de hablar no es escuchar, estar pensando en lo que vas a decir
mientras el otro comenta su idea no es escuchar. Escuchar es procesar lo que
estoy oyendo, darle un significado y hacer un esfuerzo por intentar comprender,
desde el lugar del otro, aquello que comparte con nosotros. En este sentido el
silencio a veces dice mucho más que las palabras, y por ello es importante
saber utilizarlo.
Como Desarrollar el arte de Escuchar.
1. Crear el Ambiente Oportuno.
1.1. Evitar el afán. Si en ese momento te es imposible escuchar, es
mejor que le propongas hacerlo en otra ocasión. Escuchar a alguien cuando
tenemos y demostramos afán es desagradable para la persona que nos está
hablando.
1.2. Busca un Lugar apropiado donde no haya distracción con otras
personas. Un lugar público jamás será una buena opción para tener una plática
con alguien.
2. Apartar un Momento Oportuno.
2.1. No tengas otras prioridades. Celular, televisión. Etc. La
tecnología es nos ha acercado a personas que están al otro extremo del mundo
pero nos ha alejado de quienes están junto a nuestro lado en la misma cama o
bajo el mismo techo donde vivimos.
2.2. Descansa de tus actividades diarias. N hagas otras cosas mientras
estas escuchando.
3. Interesarme por lo que
la otra persona habla. No hay nada más desagradable para alguien que está
hablando y se da cuenta que al otro no le interesa para nada lo que le está
hablando.
4. Hablar menos para poder
escuchar más. Santiago 1: 19 “Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para
oír, tardo para hablar, tardo para airarse”
Los seres humanos nos
entendemos dialogando, el quedarse callado o el no saber escuchar hace que nos
metamos en problemas o que crezcan los problemas que ya tenemos. Aprende a
escuchar y nuestra vida será más agradable.